Durante la Fiebre del Oro de California en la década de 1840, un puñado de afortunados se hicieron ricos al encontrar enormes pepitas de oro. Pero los empresarios que realmente ganaron fueron aquellos que proporcionaron las herramientas, suministros y servicios que los buscadores de fortuna necesitaban: los que “vendían palas”.

Esta idea de facilitar una industria en auge sin asumir directamente sus riesgos es una filosofía que se mantiene vigente para muchas oportunidades comerciales modernas, especialmente las revoluciones tecnológicas que cambian el juego, como la inteligencia artificial (IA).

En Busca del Oro

No hay duda del inmenso potencial de recompensas que conlleva estar a la vanguardia de la revolución de la IA. Las empresas que desarrollen modelos y aplicaciones revolucionarias de IA podrían obtener una ventaja competitiva que remodelaría industrias enteras y generaría ganancias de billones de dólares.

Pero este potencial también conlleva riesgos y costos estratosféricos. Desarrollar IA avanzada requiere invertir miles de millones en investigación, infraestructura de computación especializada y talento técnico de élite, sin garantía de generar un producto viable o recuperar esos gastos exorbitantes.

Vender Palas

En lugar de unirse directamente a la frenética “fiebre del oro” de la IA, las empresas astutas pueden obtener ganancias proporcionando herramientas, servicios e infraestructura cruciales a quienes lideran el camino. Este modelo de “vender palas” ofrece algunas ventajas clave:

• Menor riesgo: No es necesario apostar tu futuro en proyectos de I+D enormemente costosos que pueden no rendir.

• Base de clientes diversificada: Puedes suministrar “palas” a múltiples jugadores en lugar de apostar por un solo caballo.

• Flujos de ingresos más estables: Facilitar una industria a menudo proporciona ingresos más confiables que intentar disrupciones de cambio de juego.

Siguiendo el ejemplo de Nvidia

La reconocida empresa de tarjetas gráficas, Nvidia, ha empleado hábilmente esta filosofía durante el reciente auge de la IA. Mientras que los gigantes tecnológicos vierten fortunas en el desarrollo de modelos avanzados de IA, Nvidia se ha consolidado como un proveedor vital de GPU de alto rendimiento y tecnologías de chips que alimentan los motores de computación detrás de la IA.

Los ingresos de Nvidia por ventas de computación de IA para centros de datos han aumentado de forma exponencial. Entre sus principales clientes se encuentran Microsoft, Meta, Google y otros líderes de IA, todos hambrientos por el hardware de Nvidia, incluso mientras compiten ferozmente en el frente del software.

Esto contrasta con los caminos riesgosos de sus clientes de Nvidia: Microsoft invirtió $10 mil millones en OpenAI, esperando avances en modelos de lenguaje grandes. Meta ha perdido más de $30 mil millones en su división luchadora del metaverso. Y Google continúa vertiendo dinero en DeepMind e I+D de IA con plazos de recuperación inciertos.

Vendiendo las Palas del Futuro

Por supuesto, el dominio de las GPU de Nvidia es solo un ejemplo de vender con éxito palas a los actuales buscadores de oro de la IA. La oportunidad se extiende a una amplia gama de herramientas y servicios:

• Plataformas de computación en la nube como AWS y Azure que rentan recursos informáticos especializados en IA

• Software, marcos de trabajo y API para el desarrollo de IA de empresas como DataRobot y Weights & Biases

• Reclutamiento de talento en IA, academias de capacitación y mercados de trabajadores independientes

• Hardware de IA de nicho como los chips TPU de Google, computación neuronal y redes optimizadas para IA

La clave es identificar industrias de alto potencial e intensivas en capital y tecnologías emergentes listas para la disrupción, y luego crear productos complementarios que todos los “buscadores de oro” necesitarán mientras persiguen sus sueños dorados de IA.

Construyendo un Negocio Sostenible

Si bien este enfoque indirecto puede carecer de la gloria de encontrar oro directamente, ofrece un camino probado hacia la rentabilidad con una gestión de riesgos sensata. Pero requiere una estrategia cuidadosamente calibrada:

• Innovación constante para crear y mejorar las ofertas de “venta de palas” a medida que evolucionan las tecnologías

• Un modelo operativo escalable para atender una industria en rápida expansión

• Diversificación en múltiples segmentos de clientes para mitigar las dependencias

• Cultivar un ecosistema de socios, desarrolladores y defensores de tus herramientas/servicios

Cuando se estructura con inteligencia, un negocio de “venta de palas” puede generar flujos de ingresos estables durante décadas al catalizar múltiples generaciones de avances disruptivos en diferentes dominios, sin extenderse demasiado en ninguna empresa de alto riesgo.

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La Fiebre del Oro de California terminó desapareciendo, como la mayoría de las búsquedas frenéticas de minerales. Pero las empresas que vendían picos, bateas y otros equipos siguieron ganando dinero mucho después de que los mineros se fueron

En la era moderna de la IA, los jugadores pueden cambiar, pero la lección permanece: A veces, vender palas es el camino más seguro para encontrar el oro.